martes, 27 de junio de 2017

JUNIO. PACHACAMAC.


Tuvimos unas bonitas reuniones familiares con la visita de mi sobrina, en la casa de mi hermana y en mi casa. Mi otra hermana no pudo venir de visita, para otra vez será. Siguen los enfermos en mi familia política, pero lo pongo en manos de Dios. Y ahora sigamos con los paseos.


El 11 de setiembre del 2016 me fui con mi hijo a que conociera las ruinas de Pachacamac. Yo ya las conocía, están a dos horas de Lima (si se va en transporte publico), y aunque ahora se ven mas conservadas y el trabajo de restauración  se aprecia mejor, ya no se puede entrar en las ruinas como se hacia antes, pero al menos es un bonito recorrido.
Empieza en el Museo de Sitio de Pachacamac, donde se puede apreciar muestras de cerámica, orfebrería y textiles encontrados en la zona arqueológica, mayormente pertenecientes  la cultura Lima, Yshma, Wari y otras que poblaron esa zona. Me gustó sobre todo la colección de objetos de oro y plata, figurillas de ídolos o personajes con valor decorativo o ceremonial.

                                                     

El complejo arquitectónico está construido mayormente de adobes de diferentes formas, se encuentran templos, plazas y palacios. Entre las principales construcciones está el Acllawasi o Templo de las mujeres escogidas, el Templo del Sol, el Templo pintado y las Pirámides con rampa.

                                         
Desde lo alto del Templo del Sol se tiene una magnifica vista del valle de Lurin.

                                       

Todo el recorrido dura mas o menos tres horas, a pie, y hay que acudir con zapatillas y protección solar si se va en verano.
Es una imponente muestra de la arquitectura prehispánica costeña. Un paseo interesante y ameno y cerca de la ciudad de Lima. Que se repita.